Empiezan las buenas noticias: Nueva Zelanda festeja su victoria en la batalla contra el covid-19!
Ubicado en el suroeste del océano pacífico, Nueva Zelanda cuenta con 4.886.000 habitantes.
Su capital está poblada con 212.700 habitantes y es el lugar donde su primer ministro, Jacinda Ardern, celebró que el país haya salido "triunfante" de la pelea contra la transmisión local del coronavirus.
Igualmente la primer ministro pidió total prudencia ante la posible retirada y en forma paulatina de las restricciones impuestas después de cinco semanas de confinamiento.
La noticia fue dada en una entrevista a la prensa junto al director general de sanidad el señor Ashley Bloomfield.
En esa oportunidad la mandataria se mostró realmente optimista y resalto que su país puede seguir en la senda del "éxito", después de bajar del nivel 4 de alerta al nivel 3.
Pondera que este trabajo se realizó entre todos. Afirmó que no hay "mas" transmisión a nivel local. Así lo informó el diario local Dominion-Post.
Es más, el gobierno está analizando si, a partir del 11 de mayo, podría seguir descendiendo al nivel 2 de alerta.
Igualmente aclaró que "el país de el señor de los anillos (allí se realizó la saga) debe permanecer por el momento en el nivel 3 y esencialmente "no bajar la guardia" bajo ningún concepto.
Ardern también afirmó que los neozelandeses deben apoyar a todos los que han perdido a sus seres queridos debido a la pandemia.
También a partir de ahora los comercios que ofrecen comidas para llevar y las escuelas tienen autorización para reabrir sus puertas.
Después de estas buenas noticias también comentó que no hay ninguna certeza sobre en que momento desaparezca totalmente el riesgo de infección.
Otro tema del cual fue consultada es el de restablecer los viajes entre el territorio neozelandés y Tasmania. En este caso están conversando con el gobierno de Australia es decir con el primer ministro australiano Scott Morrison.
Igual el objetivo primordial es lidiar con el virus a nivel doméstico. De esta forma, defendiendo a su gente dijo que no está dispuesta a "poner en peligro el trabajo y sacrificio de la población" abriendo las fronteras demasiado pronto.
El director general de sanidad aclaró que respecto a la erradicación total del virus en el país, que realmente es "muy astuto" por lo que la finalidad principal del gobierno es "eliminarlo" y no "erradicarlo".
En cuanto a estadísticas en sí, podemos decir que en Nueva Zelanda hubo, hasta ahora, 1469 casos confirmandos y 19 personas fallecidas, según el último recuento de la universidad Johns Hopkins.
Recordemos que la líder progresista tuvo como objetivo y desde un primer momento reducir los contagios a "cero" con medidas de control permanente. La celeridad en la manera de actuar y las advertencias tajantes a la población dieron su efecto positivo. Hace poco tiempo el doctor Michael Baker, médico y profesor de la universidad de Otago en Wellington, y que no pertenece al gobierno, también alentó la eliminación total del virus y no solo su contención. Es más, dijo que al virus hay que tratarlo más como al sarampión que como a una gripe: algo que hay que hacer "desaparecer".
Como vemos a veces no influye en demasía el tipo de país y su poder económico sino las determinaciones y/o decisiones que los lideres pueden llegar a tomar y en el tiempo justo.
Parece que Nueva Zelanda así lo hizo.
Con esperanza y hasta la próxima…
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